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Septiembre: por qué es un mes estratégico para ofrecer financiación flexible

9/1/2025, 9:44:50 AM

Después de las vacaciones, llega septiembre: la vuelta a la rutina, nuevos proyectos y decisiones importantes de gasto. Para muchos clientes, es un mes de reorganizar presupuestos y ajustar la liquidez tras los gastos del verano.

En este contexto, la financiación flexible —y en especial el modelo multientidad— puede ser un gran aliado tanto para comercios como para consumidores y entidades financieras.

📌 1. El contexto post-verano: gasto acumulado y nuevas prioridades

Las familias y particulares llegan a septiembre con la cuenta bancaria resentida: viajes, ocio y actividades propias del verano pesan en el presupuesto. Al mismo tiempo, se concentran nuevas necesidades:

  • La vuelta al colegio o universidad.
  • Inversiones en deporte, formación o salud.
  • Reformas o compras aplazadas durante el verano.

Aquí es donde entra la financiación: permitir que el cliente siga adelante con sus planes, sin tener que renunciar por falta de liquidez inmediata.

2. Tres razones por las que septiembre es el momento perfecto para ofrecer BNPL

2.1. Recuperar liquidez sin frenar el consumo

Tras el verano, muchos consumidores necesitan equilibrar sus cuentas. Si encuentran una opción de pago flexible, pueden seguir adelante con compras de mayor valor.

2.2. Facilitar nuevas inversiones familiares y personales

En septiembre se concentran decisiones clave: material escolar, matrículas, actividades, deporte, incluso nuevas oportunidades de formación. Una financiación bien planteada puede ser la diferencia entre posponer o confirmar la compra.

2.3. Responder a la expectativa del cliente

Hoy la financiación ya no se percibe como un extra, sino como un must-have. Los clientes esperan encontrarla integrada, rápida y clara. Cuando no la ven disponible, la probabilidad de abandono aumenta.

🔄 3. ¿Por qué optar por un modelo multientidad?

Aquí es donde el enfoque de Nemuru cobra sentido. Ofrecer financiación a través de una única entidad puede funcionar… pero también puede implicar más rechazos y menos flexibilidad.

En cambio, con un modelo multientidad:

  • Se incrementa la tasa de aprobación → más clientes satisfechos.
  • Se diversifica el riesgo → menos dependencia de un único proveedor.
  • Se mejora la experiencia → el cliente solo ve un flujo sencillo, sin tener que elegir entre múltiples opciones.

Todo esto con una sola integración tecnológica, que reduce complejidad y agiliza procesos tanto para el comercio como para la entidad.

🧭 4. Un modelo win–win–win

Cuando la financiación se ofrece bien, todos ganan:

  • El cliente puede acceder a lo que necesita, con flexibilidad y confianza.
  • El comercio aumenta conversión y fidelización, mejorando su propuesta de valor.
  • Las entidades financieras acceden a más operaciones en un entorno digital, seguro y transparente.

Septiembre es un mes de decisiones: volver al cole, arrancar proyectos y reorganizar prioridades. La financiación flexible, especialmente en su versión multientidad, puede ser el factor que marque la diferencia.

No se trata solo de vender más, sino de acompañar al cliente en un momento clave, ofreciendo opciones claras y sin fricciones.

En Nemuru creemos que cuando el proceso fluye, la experiencia mejora para todos.